Durante su comparecencia en el Pleno del Senado, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que habrá «medidas adicionales» para ahorrar energía, pero que «no serán dramáticas». «No habrá racionamiento ni escenas del fin de los tiempos» como las que cree califican de derecha, por lo que envió un mensaje de «tranquilidad» a la ciudadanía.
«Permitido cambiar algunos hábitos de vida para defender nuestra forma de vida. Muy pronto las presentaremos en detalle”, añadió Sánchez sobre estas medidas adicionales de austeridad.
En su intervención en la Cámara de los Lores, enmarcada en el debate monográfico sobre la crisis energética y el contexto económico, Sánchez aseguró que el escenario para este invierno es incierto. «No sabemos qué va a pasar. No lo sabe el Gobierno de España, ni el de Alemania (…) no podemos resolver esta incógnita», afirmó.
“No podemos leer la mente de una figura (relativa al presidente ruso Vladimir Putin) que, a raíz de una pandemia, ha sumido a la humanidad en su mayor crisis de los últimos años. Putin probablemente tampoco sabe cuáles son los próximos pasos. va a pasar, por lo que en Europa nos estamos preparando para lo peor, que es una interrupción total en el consumo de gas», agregó.
Ante ello, el titular del Poder Ejecutivo ha señalado España ha decidido diversificar sus proveedores de gasel fomento de las energías renovables y la aplicación de medidas para reducir el consumo energético.
También destacó que el Gobierno favorece la «solidaridad» con el resto de los «hermanos europeos». En ese sentido, enfatizó que En la primera quincena de agosto, España exportó alrededor de 2.400 gigavatios hora al resto de la UE (GWh) de gas en forma de electricidad, que según sus cálculos corresponde al consumo de una comunidad autónoma como Cantabria durante seis meses.
Por ello, ha señalado que esta apuesta solidaria con el resto de socios europeos es un planteamiento «estratégico», ya que el futuro de sus economías podría afectar también al de España.