La primera consecuencia de la subida de tipos anunciada por el BCE es una importante subida del Euribor, lo que supone un aumento de las cuotas a pagar por las familias que han contratado una hipoteca a tipo variable. Aunque el aumento es a tanto alzado, no afecta de la misma forma a todas las hipotecas variables, sino que depende del año de celebración y de la cantidad ya desembolsada.
La gran mayoría de las hipotecas variables suscritas en nuestro país utilizan el sistema de depreciación «francés», donde la cuota mensual a pagar es constante durante 12 meses y en los primeros años del plazo del préstamo la mayor parte de la cuota se destina al pago de intereses y el resto al pago de principal. Pero con el tiempo, estos factores se invierten hasta que, al final del préstamo, básicamente solo se paga el principal. Por ello, la subida del Euribor en una hipoteca contratada en 2021 no tendrá el mismo (o similar) impacto que en una hipoteca contratada en 2005.
Que idealista/expertos en hipotecas Hicieron un cálculo teórico de la prima que pagan las familias que necesitan actualizar su crédito con el Euribor actual, en función del año en que contrataron la hipoteca. Para ello contrataron una hipoteca media de 150.000 euros a un tipo de interés Euribor + 1,5% ya 25 años, siempre que no se realizaran amortizaciones anticipadas. Por ejemplo, quien contrató una hipoteca variable en agosto de 2021 debe esperar un aumento de la cuota mensual de 118 euros (1.421 euros al año), que se reduce a 104 euros al mes (1.245 euros al año) en el caso de contrato en 2018 y solo 44 euros al mes (528 al año) si la contrató en 2005.
Además, para calcular el impacto real del incremento del indicador hay que tener en cuenta el importante volumen de hipotecas a tipo fijo firmadas en España en los últimos años, que se han convertido en el formato hipotecario más solicitado por los españoles.