Ampliar la temporada de baño es cada vez más importante para los propietarios de viviendas con piscina. Lograrlo -sin mucho esfuerzo- es posible gracias a una serie de recomendaciones que también harán que la piscina sea más energéticamente eficiente, además de más saludable para la piel y los ojos.
Las tendencias más seguidas actualmente en el sector de la piscina se basan en la sostenibilidad y digitalización. Por ello, se buscan alternativas al uso de productos químicos para el tratamiento del agua -como Hidrólisis, que utiliza la misma química del agua para crear la desinfección. y soluciones para salvarlos, como calentar el suelo de la piscina con calefacción por suelo radiante utilizando energía geotérmica. “Es importante dotar las instalaciones con los equipos más eficientes energéticamente”, explica David González, director de operaciones de Aquatic, empresa especializada en la construcción de piscinas que trabaja con Caledonian.
El experto explica que a nivel tecnológico se instalará hoy Plantas de tratamiento de aguas residuales que eliminan la cal del aguaBásicos para que la piel no se reseque al utilizar piedra caliza natural, y sistemas de comunicación para controlar la calidad del agua y gestionar su funcionamiento desde el smartphone.
El experto lo tiene claro a la hora de asesorar a alguien en la elección si quiere seguir las tendencias del sector en su propia piscina: “En lo que entendemos por piscina de lujo, podemos separar los acabados de las aplicaciones para crear confort para el usuario», dice.
Actualmente existen bombas de calor específicamente diseñadas para calentar piscinas a un precio muy bajo y con una eficiencia energética excepcional, que permiten al usuario sacar el máximo partido a su piscina ahorrando en la factura de la luz y alargando extraordinariamente la temporada de baño al aumentar el agua mantenida en la piscina. a temperatura moderada hasta el inicio de las lluvias.
Por otro lado, cada vez es más común equipar la piscina con medidores automáticos de parámetros de agua; de la piscina, además de combinarlo con elementos desinfectantes más naturales como los cloradores salinos. “Estos sistemas te ahorran agua porque no tienes que cambiarla con tanta frecuencia y productos químicos caros”, recomienda González.
Asimismo, sustituir el medio filtrante por uno de última generación “nos puede ayudar a dar un salto de calidad y tener un agua más pura y libre de elementos que resecan la piel, enrojecen los ojos o dejan olores a lejía”.